Con un acuario hay que hablar de libertad, de la necesidad de expresión y de alergia inmediata a las ataduras o los límites que se le impongan a su individualidad.
Ciertamente, atar a un acuario es casi imposible, así que las personas excesivamente posesivas o las necesitadas de compromisos convencionales deben evitar a este original y escurridizo adicto a la novedad y la libertad. Pero, no todo son dificultades en las relaciones con uno de los nacidos en los meses del frío. Si le dejas que rompa los esquemas, a cambio te promete lealtad, generosidad, amistad y sinceridad sin límites.
Puede que formar una familia no sea su objetivo número uno ni su habilidad especial de la casa, pero a quien le gusten las relaciones abiertas, saludables y de mutuo enriquecimiento, un acuario le resultará irresistiblemente seductor y muy atractivo.
Ciertamente, atar a un acuario es casi imposible, así que las personas excesivamente posesivas o las necesitadas de compromisos convencionales deben evitar a este original y escurridizo adicto a la novedad y la libertad. Pero, no todo son dificultades en las relaciones con uno de los nacidos en los meses del frío. Si le dejas que rompa los esquemas, a cambio te promete lealtad, generosidad, amistad y sinceridad sin límites.
Puede que formar una familia no sea su objetivo número uno ni su habilidad especial de la casa, pero a quien le gusten las relaciones abiertas, saludables y de mutuo enriquecimiento, un acuario le resultará irresistiblemente seductor y muy atractivo.