Estamos aquí en presencia de un signo optimista, amante de la libertad, espontáneo, jovial, de muy buen humor, deportista, honesto, sincero y directo en sus cosas, filosófico e intelectual, la pareja perfecta para vivir cada día en un verdadero paraíso ¡un compañero de viaje ideal!
¿Qué ocurre cuando en lugar de esas hermosas cualidades expresa la parte negativa?
Vemos a quien será descuidado e irresponsable, superficial, con muy poco, o ningún tacto social causando situaciones incómodas y embarazosas porque en su obsesión de “soy sincero y digo la verdad siempre aunque duela”, no conoce límites y confunde sinceridad y honestidad con falta de educación, de sensibilidad, de discreción y respeto a los demás, entonces se vuelve inquieto y con un optimismo ciego e irrealista.
Ver LA MALDAD DE SAGITARIO