Tu signo, sensual y telúrico, regido por Venus, planeta del amor, posee lo que se llama “la sensualidad oculta”. Cuando la dejas aflorar todo el que está a tu lado se siente atraído o atraída hacia ti, no puede explicar por qué razón, pero exhalas como una especie de fragancia, perfume, un aura que destila sexualidad, deseo, la promesa de noches de pasión y de intensidad, una calidad de lenguaje inefable que cuando lo utilizas te conduce directamente al corazón de los demás.
Tu piel excitable y sensible, tu mirada tierna, y tu manera de insistir, persistente y sin flaquear hace que cuando quieras algo lo consigas y no haya barreras insalvables ni obstáculos que no seas capaz de vencer.