En abril será mejor que no descubras tus intenciones, pues un cielo de arrastre va a continuar ejerciendo presión por encima de nuestras cabezas y va a acentuar, sobre todo al principio del mes la tensión social, económica y los riesgos de ofensivas tanto en el interior del país como fuera de nuestras fronteras.
Una coyuntura que, decididamente, va a someternos a una dura prueba en la que tendremos que buscar qué esquemas necesitan una transformación, qué tenemos que eliminar y reinventar para poder avanzar sin sacrificar algunos de los logros conseguidos hasta ahora.